El lado humano de la Transformación Digital

El uso de la tecnología en las organizaciones se expande a una velocidad asombrosa y la situación generada por el COVID-19 ha acelerado los esfuerzos de transformación digital que muchas organizaciones se estaban planteando. ¡La transformación digital llegó de forma irreversible y para quedarse!

 En la búsqueda de mayor eficiencia y agilidad, cada día más organizaciones adoptan nuevas tecnologías enfocadas en el mundo digital y realizan importantes inversiones para alcanzar el éxito en sus procesos de transformación digital. Según la Worldwide Digital Transformation Spending Guide elaborada por la firma International Data Corp., se espera que el gasto por este concepto alcance los 1,97 trillones de dólares en 2022.

A pesar de este crecimiento, no todas están logrando los resultados que esperaban. Y es que la transformación digital no es un tema de tecnología. Comienza con la estrategia y visión de la organización e incluye la gestión del talento humano, el desarrollo de nuevas capacidades, la reformulación de los procesos, la apertura de espacios para la innovación, además de un nuevo equipamiento tecnológico, entre otros factores que constituyen un auténtico desafío.

Siempre se trata de la gente

Transformación digital

La transformación digital es en esencia un cambio cultural que redefine a gran escala la forma de hacer las cosas en la organización, en donde el talento humano –lejos de lo que algunos creen- es un factor crítico para lograr una implementación exitosa.

De acuerdo al estudio realizado por la firma Right Management “De líderes tradicionales a líderes digitales. Cómo liderar a través de la transformación digital” el 87% de los responsables de Recursos Humanos no cree contar con el talento de liderazgo necesario para impulsar el éxito de las estrategias de transformación digital y la brecha entre las ideas tradicionales de eficacia del liderazgo y lo que en realidad lleva a mantener un rendimiento sostenido en la era digital se está volviendo cada vez más evidente.

Nos encontramos de esta forma ante el nacimiento de una nueva especie: los líderes digitales, que contrario a lo que se piensa, no llegan para reemplazar a los líderes tradicionales sino a trabajar de manera mancomunada con ellos.

Ante esta realidad, surgen grandes interrogantes: ¿qué talento necesitamos? ¿qué capacidades debemos desarrollar? ¿cómo construimos esa cultura digital? ¿cómo promovemos la innovación? ¿cómo maximizamos las capacidades para que todos sean parte? Estos planteamientos tienen como respuesta un elemento común: se trata de gente.

Alinear el ritmo para cambiar

La capacidad de transformar digitalmente el negocio está determinada en gran parte por una estrategia digital clara alineada con los objetivos del negocio, apoyada por líderes que promueven una cultura capaz de cambiar.

A la hora de implementar una estrategia de transformación digital, tenemos que estar claros de que no todas las personas dentro de la organización lo asumirán de la misma manera. Es fundamental conocer expectativas y sensibilidades asociadas al proceso de cambio, entender las barreras y posibles dificultades, e identificar a aquellas personas que serán las primeras en adoptar el cambio y que sumarán a otros en el proceso.

Contar con un plan para la gestión del cambio, que ponga a las personas en el centro desde el inicio, constituye una prioridad en los procesos de transformación digital, pues al final la tecnología es solo tan eficaz como las personas que la usan.

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Ana Carrasquero
Gerente de Consultoría – Head de Comunicaciones Internas & Employee Engagement 
acarrasquero@komunikalatam.com
Linkedin: Ana Carrasquero

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